A la hora de la compra de una vivienda, siempre nos marcamos una cantidad límite a la cual podemos hacer frente sin problemas con nuestro sueldo, lo normal es que se calcule cuánto podríamos destinar mensualmente al pago de la hipoteca y contratemos una algo inferior, para que en todo momento podamos pagarla.

Pero nunca estamos a salvo de cualquier imprevisto y estos imorevistos pueden ser el fallecimiento antes de amortizarla por completo o un accidente o una enfermedad que nos impida trabajar durante el resto de nuestra vida, reduciendo así nuestros ingresos. Para hacer frente a estos dos imprevistos graves Mapfre cuenta con un seguro de amortización de préstamos personales, más en concreto de préstamos hipotecarios, que nos permite hacer frente a una situación de extrema gravedad.

El seguro de amortización de préstamos de Mapfre garantiza al asegurado que se hará cargo del importe que se adeude al banco en caso de fallecimiento, liberando así a los familiares del fallecido de las cargas económicas con las que pueda contar la vivienda.

Del mismo modo, este seguro garantiza también el pago de la hipoteca en caso de que el asegurado sufra una invalidez permanente y absoluta, que le obligue a dejar su puesto de trabajo y a cobrar una pensión que en la mayoría de las ocasiones es sensiblemente inferior al sueldo y no es lo suficientemente elevada como para afrontar un gasto de este tipo.

Las condiciones de la póliza dependerán de las condiciones de la hipoteca. Este seguro se suscribe por el tiempo que reste al asegurado por pagar al banco, con un máximo de 40 años. Igualmente, el capital asegurado será el mismo que le reste por pagar al titular en el vencimiento anterior a su contratación, con un mínimo de 6.000 euros. Es posible también suscribir la póliza con el pago de una sola prima, más o menos elevada dependiendo del capital que reste por amortizar.

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